Esencialmente, el código de barras es una forma de escritura alfanumérica que emplea barras y espacios para cifrar el código que ha recibido una mercancía, el cual puede incluir toda clase de datos como nombre, precio, procedencia, fecha de recibo, fecha de entrega, y tanto valor e información se desee asociar a este código según la conveniencia de la empresa que lo está manipulando. Este punto es importante resaltarlo porque la modificación en el tamaño de un código puede llevar a lecturas equivocadas del tipo de producto que se está registrando.
Ahora bien, hay varios factores de importancia que tienen que considerar los usuarios al momento de usar las impresoras de etiquetas o al utilizar un código específico. Con el fin de ayudarles, continuaremos mencionando algunas recomendaciones relacionadas con el tamaño de los códigos, los cuales seguramente les serán de suma utilidad:
- Es sumamente importante y necesario respetar adecuadamente las señales de encuadre. Modificar o imprimir sobre algún tipo de ilustración, mancha, o colocar el código demasiado cerca del borde de un producto dificulta la lectura de la simbología.
- En artículos de alto consumo el tamaño estándar del código de barras suele ser un factor de 1.5 para facilitar la lectura ya que se podría emplear en almacenes de forma automatizada.
- Algunos productos pueden contener barras de tamaño reducido debido a las propias dimensiones del producto, pero la lectura suele dificultarse con ello para los scanners de código de barras.
A esto cabe agregar que la impresión sobre materiales opacos, como el cartón, facilita el escaneo de un producto, siendo el plástico reflejante el material más complicado de utilizar; algo que deben considerar al imprimir sus etiquetas. Esperamos esta publicación les haya sido de utilidad. Si desean conocer más detalles relacionados con el código de barras, no duden en contactarnos.
