Las fotocopiadoras son máquinas que se emplean cotidianamente para hacer una copia fiel de un original impreso, el cual puede estar compuesto de texto e imágenes. Hay que recordar que la palabra foto es un derivado del griego y que una traducción posible podría ser “luz”, por lo que el significado de todo el término bien sería “copia con luz” o “copia con el uso de la luz”.
El avance tecnológico ha permitido que las fotocopiadoras tengan funciones cada vez más complejas, como puede ser la ampliación de una imagen o documento (dependiendo de las capacidades de la copiadora se podrá hacer el aumento en distintos tamaños, desde una hoja carta hasta un gran formato, sólo es cuestión del tipo de trabajo que requiera el cliente).
El proceso de reducción, el cual consiste exactamente en lo contrario: imprimir en pequeño formato las imágenes o diseños más grandes; finalmente están las máquinas cuya capacidad les permite entregar producciones que se manejan en miles (estamos de acuerdo que un día de trabajo de una producción tan elevada, para una copiadora estándar, puede provocar futuras fallas o su nula capacidad de trabajo en unas cuantas semanas).
Otro punto importante es que, a diferencia de muchas máquinas que requieren la operación de un profesional o cuya operación puede ser bastante compleja y tediosa, incluso los modelos más avanzados de fotocopiadoras pueden ser utilizadas por cualquier persona. Su operación es bastante sencilla. La persona encargada de trabajar con una máquina así, no tendrá que quebrarse la cabeza o enfrentarse a manejos técnicos avanzados, siempre y cuando, claro, la máquina se use de forma correcta.
Las multifuncionales actuales, tales como las de la marca nipona TOSHIBA, han ido un paso más allá en el afán de convertirse en equipos totalmente amigables para el operador, pues integran en muchos de sus modelos pantallas gráficas a color con touch screen, lo que permite a la gente utilizarlas de manera intuitiva y obtener trabajos profesionales con solo unos minutos de instrucción.
La mayoría de las personas suelen considerar como algo ya establecido el hecho de que al sacar una copia, en fotocopiadoras de calidad, original, claro, tendremos un documento fidedigno y limpio (con limpio nos referimos a que, si se trata de un escrito, por citar un caso, las letras se leerán claramente, sin manchones, huellas o partes donde la tinta se haya corrido).
El único caso en el que las fotocopiadoras podrían no cumplir esto, sería si la máquina no está operando bien, lo cual puede tener varios motivos: se trata de una maquinaria ensamblada o pirata, se le ha dado un mal uso y ésta se descompuso o, finalmente, si ya tiene un tiempo considerable de estar funcionando sin el mantenimiento requerido. Otro factor esencial es que una máquina que funciona bien, nunca dejará manchones de tinta en las prendas o el cuerpo de la persona que la está operando.
Es interesante pensar en cómo el avance tecnológico nos ha facilitado el camino, permitiéndonos realizar tareas que hace un siglo podrían haber parecido imposibles. Si alguien necesitaba una reproducción fiel de un texto, un documento legal o una imagen, se enfrentaba a un proceso largo, nada funcional y posiblemente caro, por no mencionar que había un umbral bastante grande de imperfección y poca exactitud. Tan solo hace unas décadas no era extraño utilizar papel carboncillo para tener reproducciones de documentos, lo cual hacía común la entrega de un trabajo sucio, así como terminar con manchas de tinta en las yemas de los dedos o las manos.
Gracias a la invención de las copiadoras y a su progresivo perfeccionamiento, tenemos no sólo la posibilidad de no manchar con carbón nuestra piel, sino que además podemos acceder a un sinfín de herramientas. La copia o impresión a dos caras es un buen ejemplo, ya que en primer lugar representa un ahorro considerable (imaginemos a las empresas que requieren altísimos nivel de producción al día), no sólo en consumibles y dinero (pensemos en las cifras económicas que llega a gastar en papel una empresa con tales necesidades), sino al medio ambiente, ya que un simple cambio como imprimir o sacar copias a ambos lados, ocupar papel reciclado u hojas que aún tienen una cara
o un buen espacio en blanco, podría representar hectáreas y hectáreas de bosques que no serán talados. Si pensáramos esto a gran escala, tendríamos una acción simple con un impacto ecológico considerable, pero tomar una decisión dependerá del criterio que cada empresa, proyecto o individuo tenga respecto a este tema.
Esto inevitablemente nos lleva a pensar en uno de los más grandes adelantos en esta tecnología en años, y el cual muy probablemente se convertirá en una tendencia en todas las marcas además de la que lo ha patentado: TOSHIBA. Se trata del reciclaje a nivel oficina, de manera sencilla y económica, con una multifuncional (eStudio 306LP) que imprime el papel con un tóner borrable y una unidad de borrado (RD30).
Que automáticamente separa el papel apto para su reciclaje del que no lo es, digitaliza los contenidos colocándolos en un repositorio de datos en la red local si así lo desea el usuario y ofrece la posibilidad de reutilizar una misma hoja de papel de cinco a diez veces sin problemas. Este tipo de tecnología promete un gran impacto económico para las empresas y sobre todo ecológico para nuestro planeta al adoptarse ampliamente en el orbe.
Como esto nos muestra, conforme el tiempo avanza nos encontramos con modelos más sofisticados y que hacen nuestro trabajo más económico y productivo. Si en la década de 1960 teníamos modelos simples de copiadoras, ahora tenemos, gracias a avanzados trabajos de ingeniera y a la inteligente asimilación de los avances tecnológico/científicos, maquinaria que trabaja con tecnología láser o LED o que puede comunicarse directamente con computadoras para recibir las instrucciones que hayamos programado.
Es posible realizar funciones con estos equipos tales como enviar un documento escaneado a una cuenta de correo electrónico o a una memoria USB, obtener juegos de folletos tamaño doble carta ya engrapados, guardar automáticamente todos los datos digitalizados en bases de datos en las que se puede buscar texto libremente, disponibles en internet y accesibles desde cualquier dispositivo móvil, administrar cientos de equipos desde una oficina central, etc.
En TEC Electrónica le asesoramos sin compromiso para adquirir las mejores copiadoras del mercado. Si requiere mayor información no dude en ponerse en contacto con nosotros.